Si bien la razón de ser de un grifo es abrir y cerrar el paso del agua, no podemos negar que su diseño, forma, color y tamaño se ha vuelto cada vez más importante, sobre todo para marcar un estilo. La tecnología también nos ha ayudado mejor su eficiencia sin comprometer la belleza y delicadeza que estos nos dan.
Conozcamos más sobre estos elementos tan necesarios.
¿Que es un grifo?
Es el conjunto de llave de paso con una cañería. La llave de paso permite el paso o corte de agua y su salida lo hace a través del caño. No confundir con grifería, ya que este es el conjunto de grifos que utilizamos.
Los grifos pueden ser de diferentes materiales, modelos, colores o tamaños, creando estilos o adaptándose a los existentes. Según su sistema, permiten el paso de agua fría y caliente por separado o juntos, así como sistemas de ahorro de agua y energía.
Tipos de grifos
Grifos simples o sencillos
Aunque no se usan mucho para las duchas, aún podemos encontrarlos en algunas, se utiliza un grifo para agua fría y otro para agua caliente por separados.
Grifos mezcladores
Estos grifos se adaptan a las salidas de agua fría y caliente, que al ser accionadas mezclan el agua en la tubería antes de salir por el caño. La temperatura adecuada se obtiene manipulando cada comando.
Grifo monomando
Es el modelo con mayor demanda. Regula la temperatura del agua a través de su mando, Es decir, se abre el agua llevando el mando hacia arriba, pudiendo controlar la cantidad de agua que sale de manera basculante. Girando a la izquierda obtendremos agua caliente, a la derecha agua fría y en el centro agua tibia.
Grifos termostáticos
Este tipo de grifo regula y mantiene la temperatura del agua indiferentes de su presión. Vienen calibrados de fábrica a 38 °C por seguridad. En caso de que quedarse sin agua fría, se corta automáticamente el agua caliente.
Tipos de acabados
Es importante tomar atención sobre los acabados de nuestra grifería ya que influyen en el estilo y diseño que queremos tener.
Acero inoxidable
Es la aleación de acero y cromo que da una duración larga al producto. Se limpia fácilmente y resiste al óxido.
Cromado
Es uno de los materiales más usados por su resistencia al uso y la humedad. Hay que tener en cuenta el tipo de material interno ya que el cromado no asegura su durabilidad.
Níquel
Es un acabado ideal si le queremos dar cierto aire de spa a nuestro baño, además de ocultar huellas y marcas de agua. Es un acabado más caro.
Latón
Es el más común por ofrecer una alta calidad visual a bajo precio, pero necesita mayor mantenimiento de pulido para que no pierda su lustre.
Bronce
Nos da un estilo más personalizado, el bronce cepillado ofrece texturas y aspectos diversos.
¿De qué materiales están hechos los grifos?
Todo entra por lo ojos, y eso lo sabemos bien por los acabados que podemos encontrar en el mercado, pero hay algo más que debemos tomar en cuenta y con qué material está hecho el cuerpo de los grifos, así sabremos su durabilidad.
Latón. El más recomendado por su durabilidad y porque no filtra el agua, pero contienen plomo, dando la posibilidad que se filtre en el agua.
Acero inoxidable. Son buenos, pero su resistencia al uso no es muy buena haciendo que el alto costo al final sólo sea un gasto.
Zinc. Es un material más económico, pero poco recomendado por su falta de resistencia.
Y ahora, ¿cuál elegir?
Elegir un grifo de ducha no es tarea fácil, pero tampoco se muere en el intento. Te dejamos algunos consejos:
Revisa tus conexiones y presión de agua para que tu grifo trabaje sin problema.
Si buscas un estilo vanguardista, los grifos monomando o termostáticos son una buena elección.
Elige el tipo de chorro de agua que tendrá la alcachofa, así podrás tener estilo y relajación.
Algunos acabados te ofrecen tonalidades diferentes al metal que le dan un tono muy personal a tu baño como los modelos vintage.